Dos días intensos donde hemos compartido con enfermeras, matronas, auxiliares, y pediatras, de la clínica IMQ de Bilbao nuestros saberes y nuestra experiencia. Nuevamente hemos crecido con la aportación de los profesionales con los que hemos estado: Conocer las dificultades con las que se encuentran en la atención a familias en duelo por la muerte de hijos en esta etapa de la vida, y las ganas de mejorar en su atención. También hemos crecido con la aportación de asistentes que han pasado por esta dolorosa experiencia.
Dolor, amor, entrega, maduración, crecimiento, profesionalidad…. van de la mano.
Ojalá este curso de frutos hermosos en esa clínica, en Bilbao, y quien sabe hasta donde se pueden extender.
Agradecemos la colaboración de los ponentes y de la clínica IQM, en especial de Nerea Rubio, supervisora del paritorio, que pensó en este cursó y trabajó para que fuera posible.